Los seres humanos tejemos redes de conexión que, la mayoría de las veces no percibimos, un tejido de energía que va conectando pensamientos y acciones a través de lo común. Si bien cada persona, familia, comunidad, ciudad y país, tienen su particularidad, estos se ven conectados entre sí por los eventos a los que se enfrentan durante el día. Así, mientras me levanto para ir a ordeñar, hay alguien en el planeta que ordeñó y se dispone para el descanso, igual para quien va a la oficina y se enfrenta al incesante tráfico matutino mientras al otro lado del mundo, están quienes regresan enfrentando el mismo tráfico en sentido contrario. Somos iguales y estamos conectados así no lo comprendamos de manera racional.
Las vivencias nos enlazan porque detonan respuestas emocionales a cada instante, siendo las más comunes; la rabia, el miedo y la alegría.
La invitación de hoy: Conéctate con la realidad, todos tenemos problemas, nadie tiene la exclusiva. Al ser consciente de esto, comprendes que la única salida a tu “problema” es ponerte en acción desde la alegría de saber que cuentas con los recursos para avanzar.
Todo lo mejor para ti.-