Cuando llegamos a este mundo, lo hacemos como una página en blanco sobre la cual, se van imprimiendo creencias que nos ayudan a sortear los retos que nos planteamos a lo largo del camino. Cada una de estas situaciones, genera aprendizajes marcados por una carga emocional que debemos aprender a utilizar a nuestro favor. El miedo, la frustración y la rabia, la tristeza y la alegría, en sus diferentes tonalidades, nos van guiando, sin que nos demos cuenta, hacia la sabiduría.

Cuando cambiamos la actitud ante los “problemas” y conflictos, vencemos al ego, crecemos y nos preparamos para eso que tanto deseamos.

La invitación de hoy: Revisa tu historia y haz una pausa consciente en los eventos que consideras problemas o donde sientes que debiste haber actuado de manera diferente. Date cuenta, a través de lo que sientes hoy al recordar, cual fue la lección que debiste aprender, en lugar de lo que debiste hacer o dejar de hacer.

Todo lo mejor para ti.-