
Ciertamente el dicho que reza: “Lo importante es competir y no ganar” tiene un viso de verdad siempre y cuando el esfuerzo sea superior al máximo que haya podido dar, caso contrario, habré perdido incluso antes de comenzar el camino. Ese esfuerzo lo he podido medir en disciplina y en la cantidad de tiempo que me he dedicado enfocada y conscientemente a obtener lo que deseo.
La disciplina es una tarea ardua y compleja, requiere de inspiración y una férrea fuerza de voluntad para mantenernos en la pista de ese sueño que perseguimos a través de la acción.
El haber sido auto-disciplinado me ha dado las mayores satisfacciones ya que el logro es mayor cuándo es por inspiración propia en lugar de la coacción de recompensas externas, por ejemplo: Entreno porque quiero estar en forma, no porque voy a perder la plata que invertí en el gym; perderé peso porque deseo ser saludable, no para conquistar a alguien o competir con otros; consigo una actividad remunerada para no tener la presión del suelo por el cual debo trabajar sin cesar.
La invitación de hoy: Medita hasta concientizar que sin disciplina no vas a poder salir del estado en que te encuentras, es solo a través de la acción constante y enfocada que podras; peder peso, ganar dinero, inspirar a otros a ser mejores, entre otros.
Todo lo mejor para ti.-