
Cada ser humano en el planeta tiene una realidad, un mundo que le rodea, seres queridos (o no tanto) y para cada uno la realidad se va forjando a través de las experiencias vividas en su respectivo entorno. Cada quien tiene su verdad. Es así como miramos el mundo desde nuestra verdad, una cuyas dimensiones depende de la capacidad de aceptación de nuevas alternativas que den amplitud al espectro de realidades expandiendo el mundo un poco más allá de lo que podemos apreciar con la mirada.
En nuestro mundo hay verdades verdaderas, opiniones que parecen verdades y opiniones que definitivamente están fuera de todo orden.
Sabiendo esto, podemos comenzar a desarrollar tolerancia por quienes nos rodean y sus opiniones, así como la manera en como la expresan. Al permitir a los demás tener la razón y permitiéndonos a nosotros mismos tener la razón, lograremos llegar a acuerdos más duraderos y armónicos.
La invitación de hoy: Permite que los demás tengan la razón, entendiendo que es su razón, así como tú tienes la tuya y busca puntos intermedios o comunes para desarrollar una nueva verdad, o una nueva realidad.
Todo lo mejor para ti.-