Es un hecho importante en todo proceso personal comprender desde donde estoy comenzando, en el entendido que nunca es desde cero, a no ser que esté naciendo en el instante que estoy leyendo estas líneas. Pero conocerse a uno mismo no es tan sencillo como pudiéramos pensar ¿o sí? Por ambigua que parezca la respuesta, está es si y a la vez no ya que el autoconocimiento requiere de la voluntad para adquirir la consciencia necesaria que me permita darme cuenta de mis actos, palabras incluso de mis pensamientos.

Conocerse a uno mismo es tan complicado como las lecciones que esté dispuesto a aprender para elevar mi nivel de consciencia.

Aunque la realidad siempre va a estar supeditada a los ojos del observador, ciertamente los hechos, por más que desee verlos de una manera que considere “correcto”, determinarán si el curso de acciones está siendo el más favorable para el bien mayor. Ejemplos de esto hay muchos en la cotidianidad de esta sociedad tan convulsionada en la que vivimos. Asesinos que piensan que hacen el bien, manipuladores de creencias que llevan a las personas a sentir apego por algo que les causa daño, entre otros.

La invitación de hoy: Determina el tu nivel de auto-conocimiento y confróntalo con tu sistema de creencias a fin de que puedas darte cuenta de que cosas has estado haciendo “no tan bien” pensando que sí y favoreciéndote personalmente, en detrimento del bien mayor.

Todo lo mejor para ti.-