
En la actualidad solemos medir o juzgar a las personas por sus resultados y eso no está mal del todo, siempre y cuando no desvirtuemos el resultado obtenido por otros, enmarcado en nuestras expectativas. Todo el que emprende una acción va a obtener un resultado, es por ello cuidar conscientemente lo que impulsa el actuar y lo que se espera obtener.
Las intenciones impulsan las acciones, siempre y cuando tengan la suficiente fuerza emocional para llevarlas hasta el final.
Al final, como ya sabes, alinear las intenciones con las acciones es lo que potencia las probabilidades de tener éxito (obtener eso que deseo) y es aquí donde debemos cuidar nuestros pensamientos y trabajar en la elevación de la consciencia.
La invitación de hoy: Cuida tus pensamientos ya que de estos se originan las intenciones que lideran tu actuar diario.
Todo lo mejor para ti.-