Todos caemos.

Nadie está exento de caer en la trampa de los egos. Reconoce tus herramientas y avanza, sin juicio.
Nadie está exento de caer en la trampa de los egos. Reconoce tus herramientas y avanza, sin juicio.

Sin importar cuánto trabajo espiritual y de crecimiento haya realizado, siempre hay momentos en los que el ego interfiere en la serenidad que haya generado hasta ese momento, es como si me pusiera a prueba. Este es un momento interesante ya que, aún teniendo las herramientas para salir de la emocionalidad que supone el control de los egos, suelo Sigue leyendo