El verdadero maestro.

La primera lección siempre es muy dura de asimilar. Basta con abrir el corazón y apagar la razón para entender.
La primera lección siempre es muy dura de asimilar. Basta con abrir el corazón y apagar la razón para entender.

Sentados a la luz de la brazas en vísperas del inicio del entrenamiento dice el maestro al reducido grupo de nuevos estudiantes

– Si quieren llenar su taza, deben vaciarla de todo lo que tiene.

Casualmente acababan de servir algo de té y algunos de los nuevos encogiéndose de hombros, voltearon sus tazas derramando el preciado líquido para antes del descanso de la noche.

La paciencia es una de las mayores muestras de sabiduría.
La paciencia es una de las mayores muestras de sabiduría.

–Tenemos Sigue leyendo