Vivir entusiasmados es estar en comunión con Dios, de hecho ese es el significado de esta palabra según su etimología. Estar con Dios dentro de sí es una experiencia que vivimos solo cuando nos damos el permiso, sin darnos cuenta de que podemos acceder a esta “línea directa” cada vez que lo deseemos.

Es una sensación que no te permite quedarte quieto, algo que te impulsa a hacer, pone tu mente a trabajar de manera clara y precisa, la sensación es la de que eres indetenible y que nada, absolutamente nada sobre esta tierra puede frenar tu impulso. No hay peros en esto, solo los que tú seas capaz de colocar como argumentos al respecto.

Y para no perder nuestra línea de apoyo en conexión permanente, Una vez que termines de argumentar, pero inmediatamente después, toma algo que escriba, también algo sobre lo cual puedas escribir y anota todas las “excusas” que acabas de esgrimir en contra de esto. ¿Listo? Bien, ahora:

• Acabas de anotar las emociones que te tienen atrapado en eso que te incomoda desde hace tiempo y no habías logrado identificar.
• Ya tienes algo sobre lo cual puedes trabajar para convertirte en una mejor persona y obtener todo lo que tú quieras en esta vida, sin intermediarios, sin obstáculos, directo de la fuente.
• Te conocerás un poco más si te atreves a verte con amor y darte cuenta de que eres tu quien pone los obstáculos.
• Podrás mirarte en retrospectiva y agradecer todo aquello que te trajo hasta aquí, este momento y comenzar a reconstruirte o en el mejor de los casos, a remodelarte, siempre viene bien una actualización ¿no?

¿Difícil de creer? Seguro que sí, pero esta puede ser tu primera excusa. Solo abre tu corazón y permite que Dios, sea como sea que creas de él, obre el milagro en ti y te permita convertirte en su servidor. Que Dios te Bendiga.

Todo lo mejor para ti.-