
Durante mi trabajo como consultor personal y empresarial me he topado con diversas situaciones en las que los temas parecen ser recurrentes o repetitivos. Ciertamente cada situación es única, pero los orígenes y posibles soluciones parecieran ser las mismas recomendadas a otros individuos u organizaciones. Entre ellos: La falta de claridad en la identificación de emociones y en la definición de propósitos, el ser víctimas de las circunstancias a costa del liderazgo personal y/o el no reconocimiento de los valores personales ni organizacionales, son solo algunas de las causas de problemas que a simple vista parecen únicos, pero que no son más que réplicas de algunos vistos es otros lugares y circunstancias.
No existe la exclusiva en los problemas, todos los tenemos y a la vez, son los mismos o algo muy parecido.
Al observar con detenimiento y sentido verdaderamente crítico, es posible apreciar las alternativas de solución que darán como resultado un crecimiento personal y colectivo.
La invitación de hoy: Observa tu situación actual, especialmente en las áreas en las que sientes conflicto, luego has un viaje en retrospectiva y aprecia si estás repitiendo alguna historia, de ser así, ya tienes la solución.
Todo lo mejor para ti.-