
La acción sustentada en valores y orientada por un propósito claro, retador y alcanzable, es lo que dará sentido a mi vida y orientará cada una de las decisiones que tome en el camino. A su vez, mi entorno comenzará a reflejar de manera prístina y consecuente, todo lo que vaya saliendo de mí.
Dios responde a mi energía, a lo que sale de mi corazón expresado en servicio a los demás.
Por favor no mal interpretes este pensamiento, servir a otros no quiere decir que no exista la retribución, ten presente que el universo siempre es balanceado y por ende, a cada acción existe una reacción y esta será no solo similar, sino proporcional al esfuerzo, dedicación, disciplina y pasión que imprima a mis acciones integrales (pensamientos, palabras y acciones).
La invitación de hoy: Continúa con los ejercicios de identificación de valores y propósito de vida, hazlo hasta que vibre de emoción con ellos, entonces estarás listo para comenzar a apreciar los avances en cualquier empresa que te hayas propuesto y sobre la cual estés trabajando.
Todo lo mejor para ti.-