
Siento que a pesar de la limitación de las palabras y del propio criterio que empleo en este espacio para transmitir mis ideas, en los pasados artículos fui bastante extenso en comunicar mi pensar sobre el hecho que me llama poderosamente la atención y que ha dado pie a querer saber más e inmiscuirme, no solo en el estudio (al cual me hubiese gustado dedicarle más tiempo), sino también a la práctica de las ideas de la metafísica, la meditación trascendental y más recientemente el misticismo y filosofías orientales; esté relacionada con la diferencia en la velocidad de cambio que experimentó la humanidad durante el siglo XX. Este cambio que ha Sigue leyendo
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