
Querer saber las cosas puede ser tan adictivo como cualquier droga, la sed desenfrenada de conocimiento a veces pasa desapercibida pues no causa enfermedad física alguna, al menos en apariencia. No se trata de que saber sea malo, sino que el ansia por tener el conocimiento, al igual que en otras áreas de la cotidianidad humana, ocasiona el estrés necesario para culminar con alguna dolencia que tarde o temprano nos afectará en el cuerpo físico.
Muchos argumentarán que saber es importante porque “La Información es Poder” según dicta el refranero popular. A decir verdad es complicado saber quién acuño esta frase por primera vez, lo cierto es que y desde un óptica más sensata el industrial Henry Ford es quien aparece como autor de la misma, pero con una ligera añadidura que le da sentido prospectivo a este dicho, “La información aplicada es poder”. No se trata de tener información por saber, sino para hacer.
Trayendo esto a la aplicabilidad cotidiana, pudiéramos decir que buscar en la radio un reporte de transito es supremamente útil para facilitarnos la vida en un día congestionado, caso contrario sería enterarnos de una tragedia ocurrida en alguna otra parte del mundo, especialmente si nuestra capacidad de ayuda es bastante limitada, por no decir nula, siempre se puede hacer aunque sea una oración.

- Hoy en día es posible acceder a muchísima información, cuida tu búsqueda, esto lo logras prestando atención y haciendo preguntas. ¿Cómo esto me ayuda a mi o a otros a ser mejores personas el día de hoy?
- La información se ha convertido en una herramienta poderosa para vender programas, periódicos, revistas, entre otros. ¿Qué te impresiona de las noticias, el sensacionalismo, la tragedia ajena? Una vez más presta atención a tus emociones.
- Mucha de la información que recibimos a diario no nos es de utilidad, selecciona mejor lo que miras o escuchas en periódicos, revistas, televisión o radio. El exceso de información puede ser la causa del estrés sin origen aparente que te causa algunas dolencias, entre ellas fatiga.
Mayormente nuestros egos nos llevan a la búsqueda interminable de información a través de noticias, cursos, libros, sin darnos cuenta de que estamos distraídos de lo que es realmente útil para nuestro desarrollo y el de los demás. La invitación, una vez más, es a que prestes atención a tu emocionalidad.
Todo lo mejor para ti.-