Dicen que lo que cuenta es la intención, cosa con la que personalmente no estoy muy de acuerdo. La intención como impulso para hacer es la que verdaderamente cuenta, no aquella que se queda solo en las ganas o la idea de llevar a cabo algo en particular. Si deseo avanzar, pero no hago algo por moverme, la intención quedará solo en una idea, en un deseo.

Toda intención está cargada de la energía necesaria para realizar la acción que me llevará hasta el logro, caso contrario es solo un deseo.

La invitación de hoy: Revisa tus intenciones y enfócate en las que tienen energía suficiente para impulsarte a la acción.

Todo lo mejor para ti.-