
Por costumbre o formación solemos relacionar la espiritualidad con la religión, lo que trae consigo el consecuente alejamiento de la espiritualidad verdadera por el natural rechazo a los hábito de los rituales y celebraciones religiosas. Es así como nos perdemos la espiritualidad existente en la contemplación la naturaleza, en la auto-observación del comportamiento, los encuentros amorosos/sexuales, los abrazos entre amigos, la que hay en la cerveza, el vino y la música, en fin, en toda la creación humana.
Sin importar el nivel de consciencia sobre lo que se hace, la espiritualidad está en toda la creación humana.
La clave de la espiritualidad verdadera está en la consciencia con la que experimento las situaciones cotidianas y en esa misma medida, en como la transmito a los demás
La invitación de hoy: Procura consciencia en todo momento, mientras cocinas, lavas tu auto o haces el amor. Así lograrás la conexión que andas buscando, a veces sin saberlo.
Todo lo mejor para ti.-