
Todo esfuerzo rinde frutos y estos muchas veces son imperceptibles, especialmente cuando no se parecen a lo que deseaba obtener con mis acciones. Pero si presto atención a mis emociones, podré identificar cuando las semillas plantadas están germinando.
Debo ser consciente que los resultados deseados dependen no solo de la acción sino también de la alineación de estas con mis pensamientos y emociones.
Ser consciente es darme cuenta y esto ocurre en la medida que presto atención a lo más importante para mí, Yo.
La invitación de hoy: Debes prestar atención para poder aprender, también saber que las pruebas son diarias y repetidas en la medida que no las superes, así que manos a la obra.
Todo lo mejor para ti.-