Es lo que suena en mi cabeza cada vez que me topo con una oportunidad clara de avanzar en consciencia y hablando de manera personal, cuando sé que puedo contribuir al logro de mi propósito de vida. Sin importar cuanto temor sienta sobre el desenlace del nuevo emprendimiento, brota una sensación de confianza que me impulsa a llevar adelante ese nuevo reto.

El entusiasmo (sentir a Dios por dentro) por lo que haces aparece más frecuentemente cuando comienzas a superar tus miedos básicos.

Mucho es lo que se dice sobre “ser valientes” o “no tener miedo”, esto último dista mucho de la realidad de este plano, el miedo es parte de nuestra naturaleza como seres humanos, sin él, la especie posiblemente no existiera. De cualquier manera, podemos aprender a vivir con él o enfrentarlo para conseguir lo que deseamos, en ambos casos ten presente que siempre que se presente una oportunidad, estarás listo para aprovecharla, sin importar lo que tu ego ponga en tu cabeza a través de pensamientos o creencias limitantes.

La invitación de hoy: Está atento a lo que sientes, principalmente si es miedo, ese puede ser el indicador más claro del tamaño de la oportunidad que se te presenta.

Todo lo mejor para ti.-