
Está sobradamente difundida la historia de Albert Einstein sobre la existencia o no de la oscuridad, la cual, también cita en su contenido, al frío y a la maldad, aludiendo en ambos casos, al frío que es la ausencia de calor y la maldad, simplemente, la ausencia de Dios en la humanidad.
Nuestra oscuridad es también, la ausencia de luz en nuestros corazones y cuando miramos honestamente, los egos se disipan, dando paso a la intuición y a la conexión con Dios.
La invitación de hoy: Presta atención a tus sombras y trae luz a tu vida.
Todo lo mejor para ti.-
Bilko