Cuando miramos el mundo que nos rodea, lo hacemos a través de los filtros de nuestro pensamiento, este ha sido forjado por las emociones generadas en cada una de las experiencias vividas. En cambio, la contemplación va un paso más allá, contemplar transciende los filtros del pensamiento y las emociones, permitiéndome apreciar la verdadera esencia del mundo que me rodea.

La única manera de contemplar es quitando los filtros y para ello es necesario deslastrarnos de los pensamientos que nos atan a las emociones que restringen nuestros sentidos.

Solo en momentos de cambios, nos permitimos aislarnos de manera tal que, los pensamientos dejan de abrumarnos y dan paso a la claridad de un mundo distinto al que hemos venido apreciando a través de los filtros emocionales, los cuales, dicho sea de paso, han tergiversado toda realidad.

La invitación de hoy: Aprovecha el espacio que la providencia nos ha concedido a todos para contemplar esta realidad de cambios, como una bendición. Hazlo sin prejuicios ni pesares, pues de cualquier manera has de vivir esta nueva realidad. Contempla.

Todo lo mejor para ti.-

Bilko Castro Arias