Todas las situaciones de la vida son merecedoras de un agradecimiento, las agradables y las consideradas «desagradables», cada una de ellas fueron creadas por nuestros egos para darnos una lección, mostrarnos un camino y crear una experiencia de vida que nos lleve a al crecimiento a través de la superación del obstáculo. Aun así, si no aprendemos la lección, la vida o nuestros egos, nos las vuelve a poner al frente.

Depende da cada quien obtener los aprendizajes y seguir a la siguiente lección, las cuales valga decir, no terminan, aunque parezca tortuoso, siempre tenemos algo nuevo que aprender y de que darnos cuenta, mientras estemos en este plano de vida. Ver las lecciones no siempre es una tarea fácil, requiere de valor y fortaleza es espíritu para enfrentarnos a nuestra realidad. Para ello, algunas preguntas que vale la pena realizarse con cierta frecuencia pueden ser: ¿hay algún momento en mi vida que no merezca ser repetido? ¿Cual es ese evento que parece repetirse de vez en cuando en mi experiencia de vida? De las experiencias que aparentemente no dejaron nada ¿Acaso no hay un aprendizaje que rescatar? Así sea el de “como No Hacer Las Cosas”.

Reflexiona un momento, puedes encontrar soluciones a problemas de larga data, todo nos enseña, hasta la materia que consideramos menos útil en la escuela.

Todo lo mejor para ti.-