Cuando estamos conscientes de nuestro momento presente, somos capaces de muchas cosas, entre ellas, ver las conexiones entre los eventos, esas que mayormente no comprendemos y entonces, solo cuando las podemos ver, se calma la angustia por desconocer el resultado trayendo certeza a nuestras vidas.
Ahora bien, lo complicado no es ver las conexiones, es estar en el momento presente. Tan complicado es que hasta pensamos que eso de vivir en el ahora es una fantasía vivida únicamente por lo grandes gurúes de la espiritualidad mundial, incluso por algunos escritores que dicen haberla experimentado. Nuestros egos encargados de crear situaciones, también nos ayudan manteniendo la máquina pensante en movimiento permanente, generando así más y más ideas que tienden más que a nublar nutra visión, a distraernos de los objetivos que nos trazamos.

Hallar las conexiones entre los eventos puede llevarnos a comprender cuales son los aprendizajes que nos tocan, es visualizar resultados, trazar el mapa que nos llevará a donde queremos, siempre y cuando sepamos que es. Estar en el momento presente es, calmar la ansiedad por el futuro y los reproches del pasado que no nos permiten avanzar, vivir en el ahora es, estar en conexión con Dios y es allí precisamente donde están la plenitud y la felicidad.
Todo lo mejor para ti.-