
Como ya les he comentado en muchos artículos, las no es posible controlar las emociones. Estas, más allá de tener origen en nuestros pensamientos, también incluyen reacciones químicas y la participación de todo un sistema orquestado que incluye órganos y glándulas. En definitiva, cuando inicia una reacción química, es muy complejo detenerla antes que esta culmine y en tal sentido, la explosión emocional se hace totalmente incontrolable.
Mantener las emociones al margen significa que debemos canalizar nuestros pensamientos, esos del pasado o del futuro que generan la emocionalidad alterada, al tiempo que utilizamos la racionalidad para contenerlas.
Si, lo sé, todo esto se dice muy rápido y fácil, pero como cualquier actividad humana, la práctica tiene como consecuencia la maestría. Eso sí, la cantidad de práctica requerida para es incuantificable y dependerá de la individualidad de cada quien. Míralo de esta manera, hasta Jesús de Nazareth tuvo sus vicisitudes con ellas, así que es importante que comiences a prestarles atención, porque si al mesías le ocurrió, que podemos esperar nosotros los normales.
La invitación de hoy: Observa tus reacciones emocionales y determina cual es el detonador, interno o externo, una vez que identifiques que pensamientos están involucrados en dicha emoción, te será más sencillo canalizarla y marginarla a fin de mantenerte en el presente.
Todo lo mejor para ti.-
Bilko Castro A.
[…] siempre tus emociones al margen, no las controles, pues es imposible, a no ser que trabajes en la canalización de tus […]