
Ahora en serio. Esto de meditar es bueno, pero ¿hay algún truco o tema oculto en todo ello? Como en todo, siempre lo hay. Si bien es cierto que meditar tiene efectos positivos en nuestra mente y cuerpo físico, también este ejercicio, tiene efectos sobre nuestros egos. Así es, tal como lo acabas de leer. Nuestros egos son parte de nosotros y como tal, también se ven afectados por cualquier intento de expandir nuestra consciencia.
La respuesta de nuestros egos normalmente no se hace esperar.
Al inicio de nuestras prácticas de meditación, los egos reaccionarán de manera inmediata de la única manera en que pueden hacerlo, alterando nuestra emocionalidad. Ya he comentado amplia y extensamente sobre la función y funcionamiento de los cuerpos de los egos y de la manera en como influyen en nuestras vidas cuando se encuentran bajo estados alterados. Ahora bien, una vez que comienza nuestra acción para expandir nuestra consciencia, entonces, el espacio vibratorio de los egos se altera, haciendo que estos influyan en nuestro comportamiento
Al alterar nuestro comportamiento, el mundo que nos rodea comienza, literalmente, a cambiar.
Cuando todo comienza a cambiar, no nos queda otra que cambiar y esto trae como consecuencia la ya conocida resistencia al cambio, a ese no querer dejar la zona de comodidad en la que nos encontramos, entonces, la emocionalidad en forma de miedo, rabia, tristeza, entre muchas otras, comienzan a aparecer, a veces, sin motivos aparentes. Esto comienza a complicar las situaciones, haciéndonos sentir, incomodos o simplemente mal por las decisiones que hemos tomado.
Las primeras reacciones siempre son las más fuertes.
Estas reacciones de nuestros egos, son las que, mayormente, suelen alejarnos de un camino de transformación, haciendo que regresemos a las conductas y comportamientos, de las cuales queremos o necesitamos alejarnos. Es aquí donde debemos tener cuidado y actuar en consecuencia para no salir del camino que hemos iniciado.
La invitación de hoy: Observa bien tus reacciones, especialmente cuando has iniciado procesos que implican ejercicios de meditación o conexión con la divinidad. Estas reacciones, parecieran ser producto de situaciones externas, pero lo que ocurre afuera, es consecuencia del conflicto que hay dentro, es decir, los egos resistiéndose al cambio.
Todo lo mejor para ti.-
Bilko Castro Arias