Sucumbir.

Mantente alerta y consciente.

El camino de la consciencia está pleno de tentaciones, pero no como las que describe la iglesia, en las que pecamos por hacer o dejar de hacer, sino de aquellas que nos invitan a mantenernos en estados bajo de consciencia que no permiten el crecimiento hacia un mejor SER. Por ejemplo la tentación de ser víctimas de las circunstancias o personas, mantenernos en el miedo, la arrogancia y la soberbia, entre muchas otras. Si bien se parecen a los pecados Sigue leyendo

Culpable.

A la hora de una falta, no existe un juez más duro que nosotros mismos.
A la hora de una falta, no existe un juez más duro que nosotros mismos.

Sentirse culpable de algo tiene serias consecuencias sobre nuestras vidas, opacan nuestra visión del mundo, nos hace llevar pesadas cargas que complican nuestro andar y nos colocan en una de las posiciones más cómodas para las personas, la de víctima. Cuando estamos siendo víctimas no tenemos la oportunidad de mirarnos con amor y permanecemos viviendo en la autocompasión.

La culpa sin lugar Sigue leyendo