Ayer comentaba sobre la importancia de la práctica de disciplinada para lograr el éxito, también que, esta práctica continuada, nos llevaba a la transformación del SER. Ahora bien, esa transformación es perfecta en sí misma, aunque diste mucho de la “perfección” cuando esta es vista desde la perspectiva de nuestros egos.

Muchas veces, sin darnos cuenta, nos desgastamos en conseguir la perfección.

Pero esta perfección de los egos, es en sí misma, inalcanzable. Para nuestros sistemas Mente/Ego, nunca es suficiente, esfuerzo, sacrificio, belleza. Los egos siempre deben/quieren/necesitan/tienen que, ir más allá, pero no por el hecho de hacerlo mejor, sino porque el puro placer, solo para sentir satisfacción, que, tal como mencioné antes, es inalcanzable, logrando llevarnos a la frustración, la rabia o la tristeza, según sea el caso.

La búsqueda de la perfección es del sistema mente/ego, pero la excelencia es del SER.

Mientras que la búsqueda de la perfección nos desgasta, la de la excelencia, nos enaltece y llena de satisfacción, porque es armónica con la transformación. Avanzamos en la medida que nos hacemos mejores y nos hacemos mejores a través de la ejecución excelente al máximo de nuestras capacidades. Si no lo logramos, es porque, simplemente, aún no estamos listos para lograr y/o recibir.

Un ejemplo: Si quiero una casa de un millón de dólares, debo transformarme en una persona merecedora de una casa de ese precio.

Aquí las comparaciones son únicamente con el individuo que aparece en el espejo, no hay más. la búsqueda en ti mismo de esa persona que merece una casa de un millón de dólares, es una gesta totalmente individual. No hay otro camino, más que el recorrido, el cual ha quedado en el pasado, así que, basados en lo aprendido y sabiendo que, estos aprendizajes no son del todo ciertos, además de tener claridad de propósito y certeza de lo que deseo lograr, tengo los ingredientes necesarios para comenzar a preparar a esa persona, para iniciar la transformación interior, siguiendo los pasos de la excelencia.

La invitación de hoy: Transfórmate.

Todo lo mejor para ti.-

Bilko Castro Arias