Obediencia

Cada vez es más fácil romper las cadenas del ego que nos mantienen atados a la razón.
Cada vez es más fácil romper las cadenas vencidas del ego que nos mantienen atados a la razón.

A la mayoría de nosotros se nos pasa la vida persiguiendo señuelos convencidos de que son la razón de nuestras vidas. Nos excusamos de tomar acciones que sabemos en nuestro corazón que son lo mejor para nosotros, con el argumento de: “Es que yo soy así…” o  el de que estamos protegiendo a otros del sufrimiento, entonces, nos hacemos víctimas por cuidar a los demás sin darnos cuenta de que todo estará bien si y solo si, nosotros estamos bien.

No es un secreto el hecho de que, si buscamos razones para hacer dejar de hacer algo, las vamos a encontrar, incluso hallaremos apoyo en otros que por sus razones, impulsarán el que entremos en obediencia a nuestra intelecto, al mundo de nuestro EGO, donde el conflicto personal siempre está a la ord Sigue leyendo

Transformación III

Transformarse, cambiar, crecer, morir. Términos que a la larga nos generan temor más allá de los que podamos imaginar. Dejar de ser lo que “creemos” que somos pareciera envolvernos en un halo de misterio y eso, da miedo. Esto puede obedecer a que mayormente desconocemos que todas estas palabras implican que nos convertimos en algo definitivamente más evolucionado.

La construcción de un mejor TÚ inicia con la consciencia de saber que no eres lo que crees ser.
La construcción de un mejor TÚ inicia con la consciencia de saber que eres más y mejor de lo que crees ser.

El temor a crecer también tiene que ver con los apegos. Nos hacemos muy afectos a lo que somos en un momento determinado, sin llegar a comprender que en esta vida todo es temporal. Relaciones, Bienes, todo, incluso nosotros mismos en nuestro transitar por esta tierra tenemos una fecha de caducidad.

Siguiendo la línea, los apegos tienen que ver también con los egos. Estos, especialmente cuando Sigue leyendo

Sueños de chicos.

Uno de los pasos más importantes en el establecimiento de metas durante nuestra vida adulta es el de SOÑAR, pero ¿Acaso es que hay sueños nuevos? Cuando somos niños hay una pregunta que solemos escuchar con cierta frecuencia y es: «¿Qué quieres ser cuando seas grande?  Como si la respuesta no fuera poco menos que obvia. Esta interrogante nos despierta cierta curiosidad con el paso del tiempo. Algunos la olvidamos por completo y otros se la toman muy en serio.

Rescata tus sueños y si no, crea unos nuevos. Nunca dejes de soñar
Rescata tus sueños y si no, crea unos nuevos. Nunca dejes de soñar

Pero resulta que nuestras fantasías infantiles terminan siendo mucho más que simples juegos, más que eso, son ensayos en los que pretendemos ser aceptados por nuestros gustos y si somos bien vistos ante nuestros padres. Así, si siendo hijo de algún profesional se te ocurría decir que querías ser cantante de Rock o Actor, no faltaría quien dijera: «Bien, pero luego de estudiar una carrera» un grillete que cargaremos toda nuestras vidas si no se nos ocurre atender al llamado de ese niño o Sigue leyendo