
Esta frase la escuché por mucho tiempo en varias oportunidades, de una persona muy querida, durante mis inicios en el camino de expansión de mi consciencia. A cada evento de conflicto que ocurría en mi vida, luego de una extensa y muy apasionante conversación, terminaba por aceptar mi cuota de responsabilidad en todo aquello. Pero, una vez llegado Sigue leyendo
Debe estar conectado para enviar un comentario.