
Una vez que nos damos cuenta de nuestros miedos, las circunstancias, como por arte de magia, comienzan a cambiar. Creo que mejor, pudiera ilustrar esto con un ejemplo. Imagina por un instante que regresas a tu infancia, a un momento de esta en el que estuviste asustado por algo, o por alguna decisión que debías tomar, pero Sigue leyendo
Debe estar conectado para enviar un comentario.