
Con el tiempo he aprendido que asistir a terapia funciona extraordinariamente bien, siempre y cuando esté dispuesto a cooperar, no con el terapeuta, sino conmigo mismo. Hace no mucho tiempo me negaba al hecho que requería apoyo inmediato, algo así como una intervención, mi ego expresado en la arrogancia, me impedía tener Sigue leyendo
Debe estar conectado para enviar un comentario.